25 de diciembre 2011, domingo.


Nos levantamos tarde, por supuesto, luego de la trasnochada de la noche anterior, las libaciones y las desproporciones. Le pasé aspiradora a toda la casa, corté pasto, almorzamos con mamá, Ju durmió siesta, yo empecé a leer una novela de Saramago, Sofi se quedó en lo de la Abuela.
Volvimos a Montevideo de noche.