07 de diciembre 2011, miércoles.


Vueltas que dar. Y más vueltas que dar. Pinté un poco rato. No usé la cámara. Debo estar con bajón, todo lo que voy a fotografiar me parece aburrido o repetido. Claro, mi vida es siempre igual. Pensando, ahora, en que capaz que no me hace bien esto del autorretrato, de tener un día a día de mi vida. Que no me hace bien a mí. Aunque soy conciente de que en otro momento me pareció todo lo contario, que tener mi día a día me hacía ver, a mí, obvio, siempre a mí,  que hasta los días que parecen repetitivos y sin interés tienen algo de maravilloso. Y que la mayoría de los días parecen sin interés especial, que los días que recordamos a causa de un hecho determinado son pocos, y siempre los recordamos por un hecho muy alegre o muy desgraciado. Los días comunes y corrientes se borran de la memoria sin más.